domingo, 28 de septiembre de 2014

Magia, Inspiración y Amor (41)


Hace 41 años, llegué a este planeta como un ser pequeño, en los brazos de Mamá y con el corazón hinchado de orgullo de Papá. Hace 41 años, comenzó esta aventura que en este mundo llaman de múltiples y complicadas maneras: crecer, estudiar, conocer, saborear, experimentar, alimentarme. Aprender. Seguir... Y que si tuviera que buscar un par de palabras que me identifiquen con este número 41, sería MAGIA y AMOR.


La Magia comenzó hace 41 años, un 29 de septiembre de 1973, y en una clínica de Santiago de Chile (Las Lilas), lugar donde llegué a este mundo para ser feliz. 

Claro. Ser feliz. Y desde entonces, mi vida ha estado llena de Magia y Amor. La Magia de crecer. De recibir toda esa energía maravillosa de dos personas que en alianza de amor y deseo, me concibieron y bajaron de esa estrella universal donde todo existe y todo vive. 

Desde entonces, la Magia se convirtió también en una  gira para conocer otros países. La Magia de tener en mi vida gente maravillosa, comenzando por mi familia, conocidos, profesores, maestros, por mis amigos...y ahora, mi propia familia con mis dos pequeños hijos Cristóbal Renato y Agustín Andrés. 

La Magia de vivir y revivr, entre alegrías, penas, amarguras y esperanzas. Sueños. Agua. Luz. Horas sin dormir, mientras mis pensamientos escriben nuevas páginas a través de mi corazón y que siempre decanta en un artículo. O también, en un libro. Sí! Un libro! Hoy, por fin,  tengo en mis manos listo para su publicación, mi segundo libro: A Pura (da) Vida!

En estos 41 años de vida, soy testigo que Dios y el Universo han estado conmigo. En las buenas y en las malas. En las puras e impuras. En las difíciles. Y en las que todo fluye. He visto y he sido testigo de las señales más potentes al momento de enfrentarme a la muerte y a la nueva vida. Ya sea en un accidente de tránsito, en un asalto o un secuestro. O en el nacimiento de mis dos pequeños guerreros. 

He visto pasar delante de mi, noticias, hechos terribles y maravillosos. Reportajes. Y he escrito sobre lo que sucede, lo que nos rodea y nos empalma como responsables de una sociedad civil comprometida y a veces no tan comprometidas.

He sido testigo de la existencia a través de mi vida de personas maravillosas, mágicas. Y otras, complicadas, difíciles por no decir, tortuosas e imposibles. Personas que me han ayudado a ser mejor. Y  a a veces, convertirme en un ser que desde las alturas de mis pensamientos, de mis ganas, de mi pasión por la vida, puedo escribir algunos párrafos con sentido o sin sentido, y lograr tocar el corazón.

Mis vivencias en Chile, en Venezuela, en Estados Unidos, España, Brasil, Francia, Argentina, no sólo son timbres de pasaporte. Son timbres que han marcado mi corazón. Timbres que han marcado mis sentidos y han abierto en mi, nuevas ventanas de esperanza y de emprendimiento. Ese timbre o sello que te va dejando un poquitico de ese territorio cargado de historias, sueños.

Las personas del mundo, son como los ángeles. Llegan y vuelan. Se van. Te protegen. Te animan. Te sonríen. Y se van. Todos somos ángeles. Los ángeles del universo, del amor, de la vida. Sólo, que no nos damos cuenta.

No nos damos cuenta que en cada uno de nosotros existe un poder infinito. El poder de la sabiduría, el poder de vivir, el poder de sonreír, de ser felices, de levantarnos todos los días con un  propósito. Y en ese propósito, transferir ideas, sentimientos, ganas, fuerza, convicción. A veces, pienso que lo más triste es que millones de personas viven cegadas en sus propios miedos, temores y dudas. 

Y no rompen el celofán. No abren la ventana. O no usan la llave para abrir una puerta. La puerta para ser feliz.

Cada vez que camino con mis hijos, en sendero al parque o a jugar a la pelota, nos miramos, nos sonreímos y nos profesamos una alianza: la del amor. Para la Vida. Para nosotros mismos. Para crecer sanos y que lleguen y vuelen alto. 

Cuando bebo un café con una amiga o o un amigo, el aroma de la libertad de una amena conversación, de un sabor sincero, me hace pensar lo inmenso que somos. Y lo increíble que son las conversaciones para nuestras almas.

O cuando vuelvo a abrir la ventana de mi corazón y dejo entrar el aroma suave, la brisa fresca, el sabor a mar, la textura a arena.  Aún ahí. O sin estar ahí, pienso que merezco volver a sentir lo que alguna vez pudo ser.  Amor al fin.  



En estos 41 años de vida, en este lunes 29 de septiembre, estoy convencido que soy feliz. Que todo lo que me rodea es señal potente que Dios, ese Dios Universo, ese Dios que está en todo lo que nos rodea, me bendice, me ilumina y me anima a escribir este artículo. En brindis por la Vida. En brindis suave y frutoso por lo que más queremos.

Gracias a todos por compartir conmigo, este brindis. En estos 41 años de Magia y Amor. Y decreto otros 41 años de Amor, Vida, Esperanza, Ideas e Inspiración para todos ustedes que me han acompañado, me siguen y me esperan.

Un abrazo especial a mi gente de Venezuela. País dueño de la mitad de mi corazón. País de familia, amigos, magia y amor. País que espera un milagro. Y que estoy seguro que si todos hacemos magia, podremos recuperarlo. Fuerza mi gente! Fuerza mi Venezuela querida.

Los invito a leer mi segundo libro A Pura (da) Vida!, que espero pronto llegue hasta sus manos y vivan conmigo la Magia y el Amor, de una Vida pura y sin prisa. Pura Vida!

Se les sonríe...se les quiere....

Cristian






lunes, 15 de septiembre de 2014

Un nuevo planeta conquistado (Para Agustín en sus 6 años)

...y llegamos nuevamente a un nuevo destino, hijito mío. Con mucha alegría, sonrisas, flores (de esas que te gusta pedir prestada a la naturaleza, para regalarla a quien amas), juegos, pensamientos y una voz dulce que enciende luces maravillosas a través del Universo.

Bienvenido, nuevamente mi querido Agustín. Has llegado a tus primeros seis años de vida. Firme. Justo. Protector. Y unido en pensamiento y amor junto a quienes te amamos y en especial, este hombre que te admira desde antes que nacieras y vinieras a este mundo a llenarnos de colores multicolores.

A lo largo de estos primeros seis años, hijo mío, puedo decirte que hasta acá, vas muy bien. Y que a partir de este nuevo 15 de septiembre, será mejor aún. Comienzas un nuevo ciclo de vida, el cual te llevará por primera vez al Colegio. Donde conocerás nuevas personas, nuevos profesores, nuevos temas y serás, con justicia, un Líder. Porque naciste para serlo y unir personas, con tu hermosa sonrisa y protectora voz.

Si en los primeros 6 años, conquistaste flores, juegos, personas, deseos...con tu espíritu maravilloso de niño, niño alma, niño hombre. Que queda para los próximos seis años! Dios. Vas a ser un joven muy importante. Lo sé. Junto a Cristóbal, tu hermanito mayor, van a ser una dupla poderosa de amor, ideas, trabajo, amistades...y conquistarán -juntos- nuevos y poderosos reinos donde la magia de la vida los llenará de sorpresas y misterios. 

Mi hermoso Agustín, quiero a través de estas líneas compartir todo mi amor como papá en estos, tus 6 añitos de vida. Como lo hago todos los 15 de septiembre, estas letras que nacen del alma, de mi sangre, de mi amor por ti, quedarán impregnadas de luz, de colores, de sabores, de alegrías y nuestra complicidad infinita.

Mi príncipe de las flores, nunca dejes de sonreír tan hermoso. Nunca de dejes de correr como lo haces cada vez que nos reencontramos en un abrazo, en un beso o "buenas noches Papá". Nunca dejes de ser ese niño-hombre que seguramente contribuirá a hacer este mundo, más mundo, más unido, más sustentable.

Chile, América Latina y el mundo en general, precisa de personas maravillosas como tú y tu hermano. El planeta, cada vez gira más rápido y los días se llenan de apuro, de estrés, de compras y ventas, de logros y desaciertos.. de incoherencias y sin sabores...de dolor por la guerra, por el hambre y por la violencia urbana. Un mundo digitalizado, enredado a través de la web, de la telefonía móvil, y donde los libros, la música, la tertulia se hace cada vez más lejana y menos abundante.


Mi vida, este mundo hermoso, verde, azul, amarillo, blanco...negro, necesita de tus manos, de tus pies, de tu corazón. Y en estos seis años de vida, que comienzas ahora, este 15 de septiembre, no olvides que tu misión sigue a firme. Sigue adelante. No claudiques. Ama. Protege. Lidera y se feliz, como siempre lo ha sido.

Al escribir estas líneas, lo hago orgulloso. Contento. Y le pido al Universo, al creador, a Dios nuestro, que te bendiga siempre. Que ilumine tus pensamientos, tu corazón. Que te lleve por aquellos lugares que siempre llegarás, porque eres un gran viajero. Un esplendido aventurero. Un niño, que cuando se haga hombre, tomará su mochila, su libreta, su lápiz y tu mejor amigo "Osito Fumarola", para juntos descubrir esos reinos que necesitan de tu presencia.

No puedo dejar de decirle al mundo que en ti existe esa luz. Que ilumina, que enciende, que seduce y nos invita a ser mejores. Y cada vez que te veo junto a Cris, tu hermanito, me doy cuenta que juntos son dinamita, son poderosos aún más. 

En estos seis años, decreto para tu vida y de aquellos que llevas en tu corazón: amor, salud, abundancia, inteligencia, creatividad y que llegues muy alto en tu vuelo de águila. Y pongo en mis manos, mucha energía, la de los árboles, la del mar, la energía de nuestra madre tierra, para que te llene de mucha sabiduría y coraje, y sigas creciendo así: hermoso.


Papá, siempre estará contigo. Desde mis letras, desde mis juegos, desde mi sonrisa, desde mi corazón, que te ama y te respeta.

Feliz Cumpleaños mi amor, Felices 6! Número hermoso que calza con tu corazón y tus manos artísticas y emprendedoras. 

Te amo

Papá

                                                                                        Lunes 15 de septiembre 2014