lunes, 30 de junio de 2014

Jugando con las mejores ideas y el mejor (re) inicio


(Comparto con ustedes, un artículo que publiqué este lunes 30 de junio en mi blog de comunicación empresarial. Espero les sea útil y les guste. Un abrazo!)

Hola! Y bienvenid@s a esta columna de comunicación empresarial y de vida. Y como todos los lunes: empezar -siempre- con una sonrisa, una idea y la mejor estrategia. Así, de esta manera, apretamos el botón para reiniciar una nueva semana optimistas, con un destino claro y sabiendo que nos espera el éxito. Te lo aseguro!

Ya vamos en 59 las personas y profesionales inscritos en la importante comunidad de ICE (Ideas, Comunicación y Estrategia) que levanté la semana pasada al alero de mi consultora en comunicación empresarial y motivado precisamente por una idea que tenía hace tiempo: reunir (me) con todos aquellos quienes tienen la necesidad de compartir una experiencia, un proyecto o sencillamente buscan una voz de apoyo. 

Y que mejor que comenzar este lunes con un frase que leía anoche antes de acostarme y que pertence a Steve Jobs: "No tengo miedo de empezar desde cero". Y vaya que tiene sentido cuando a veces caemos y tropezamos en alguna venta, proyecto, o relación de vida con alguien. Sólo que a la frase de ese genio de las tecnologías y la manzana, le agregaría una sola cosa: siempre que caigamos o nos desplomemos, habrá una base donde apoyarnos y habrá un "capital" intelectual, humano y de experiencia acumulado como un tesoro que nadie ni nada lo puede quitar, embargar o robar. 

Me refiero a que si estás buscando trabajo, si quieres levantar un proyecto personal o empresa, o bien necesitas darle un vuelco en 180 grados a tu vida: pues nada, es cuestión de tomar papel y lápiz, escribir la idea (nombre del proyecto), precisar el objetivo (claro y preciso) y los pasos que vas a dar para alcanzarlo. Y usa, usa siempre toda experiencia, tu talento, tu voz, tu fe para llegar a ello. 

Si hubiere tristeza o melancolía, que suele suceder, lo mejor es "inyectarnos" una buena dósis de alegría mediante un viaje, paseo o salida a un lugar donde no haya "contaminación mental" de malas ondas y vibras. En mi caso, me gusta ir al parque, correr, ir a la playa o estar con mis hijos y jugar con ellos. Siempre me regalan (gratis) oxígeno.

A todos nos ha ocurrido que alguna vez en la vida, caemos. Y en una caida libre dolorosa y a veces ingrata. Pero, ahí está. Se llama luz, inteligencia, sabiduría de pensamientos que nos acompañan en positivo. Luz (ideas, conocimiento, oportunidades) que puedes encontrar desde que te levantas temprano, sales a correr y desayunas con un exquisito café. 

Tomas la agenda maravillosa que te regalaron a comienzo de año en ese día especial, y anotas las acciones que vas a realizar durante la semana. Acciones de verdad, concretas, reuniones con aquellas personas que aspectas con quienes vas a lograr volver a la pista y nuevamente emprender.

Este fin de semana, la selección chilena y mexicana se despidieron del Mundial en partidos frente a Brasil y Holanda, respectivamente, y algo en común sucedió y que nos debe servir de ejemplo: nada es imposible. Jugando el mejor partido de sus vidas, de cualquier campeonato mundial pasado, ambas selecciones lograron inspirar a millones de latinoamericanos con su juego vistoso, en equipo, ordenado, motivado, y con la actitud que siempre debe predominar en nuestras vidas: LA CONFIANZA CON QUE ESTAMOS HACIENDO LAS COSAS, LO QUE -DEFINITIVAMENTE-DEBEMOS HACER. 

Técnicamente hablando, Chile y México quedaron eliminados de continuar en el certamen deportivo. Pero en la práctica, en el fondo, en lo concreto, estas selecciones demostraron que están para empresas y proyectos muy grandes. Su rendimiento dentro y fuera de la cancha fue ejemplar, de calidad, a la altura de las circunstancias. Y transparentes. 

Las lágrimas del defensa chileno, Gary Medel, y de varios compatriotas más. El dolor de los mexicanos porque perdieron un partido imposible y con una jugada metirosa y hábil del holandés Robben (inventó el penal en el último minuto que llevó al alargue). Es la mejor señal que los jugadores estaban vivos. Que estaban comprometidos. Que querían más. Y eso es muy bueno. Llorar no hace mal. Te purifica. Te sana. Y demuestra que la comunicación más certera es que la que emerge desde el corazón (y las ideas). Luego viene la satisfacción. 

Les aseguro, que estos jugadores han dado un paso gigante hacia nuevos y mejores triunfos. Le han dado una lección de vida a millones de personas, y jóvenes. Entre ellos, a mi pequeño Cristóbal, de 9 años, que lloró como un jugador más dentro de la cancha. Cristóbal, estoy seguro hijito mío que este partido no lo olvidarás jamás, y recordarás que estuvimos juntos, alentando la esperanza, el amor, la pasión, juntos, unidos, y apretados en un abrazo. Cuando seas mayor, entenderás que la vida se compone de momentos y momentos. Y lo ocurrido ese fin de semana en Brasil sirvió para inspirarnos más, respetar más lo que hacemos y hacer las cosas bien.

Así como los jugadores chilenos y mexicanos, nosotros crecemos. Partiremos de cero, pero con un capital asegurado de gran valor. Que ya lo quisieran otras empresas y directivos que no han reparado en aquellos trabajadores, colaboradores y profesionales que pese a sus derrotas, tienen la varita para hacer crecer la empresa y la organización.

Yo, mi estimad@s amig@s, prefiero decirles que apuesten por vuestros sueños. Que no hay derrota. Hay momentos. Tiempos que son perfectos. Que busquemos en la idea, y la comuniquemos de manera certera, en red, en perfecta armonía entre los objetivos y el procedimiento. El tan requerido y valorado plan.

Te dejo un par de sugerencias para que las apliques en tu IDEA:

- Que tu plan sea lo más sincero posible con tus posibilidades.

- Que tu plan sea ordenado y trabajado todos los días con pequeñas grandes acciones que se vayan multiplicando y creando -a la vez- un sistema en el cual te encontrarás con nuevas oportunidades, con más personas.

-Que tu plan cuente con un esquema estratégico orientado a logros medibles, palpables, y a corto y/o mediano plazo.

- Que tu plan vaya acompañado de lecturas permanentes de experiencias exitosas de otros que como tú, también han pasado por los mismos o peores problemas. Sugiero retornar a nuestras bibliotecas y buscar excelentes libros de empresa, de ayuda y una novela inspiradora. Te sugiero "Tres Tazas de Té", de Greg Morteson y David Relin. 

-Busca un socio o socia que te acompañe, que te anime, con quien puedas compartir tu plan y te comente si le ve sentido o no. No es necesario que ese socio sea inversionista o que ponga el financiamiento a tu idea, es difícil. Ese socio puede ser la persona que menos esperabas que podía ayudarte a abrir los ojos o recibir ese empujón anímico que necesitabas.

- Compra una pizarra, y cual DT del equipo, delinea la estrategia visible, dibujala como si guera un juego. El juego de tu vida. Dibuja los pases que vas a hacer para llegar al arco contrario. Imagínate haciendo el gol. Visualiza los momentos claves. Las palabras claves y el momento en que lo celebras.

Vamos, vamos con todo querid@s amig@s. A creer y crear el proyecto que tenemos sacar adelante. La idea está. La comunicación también.

Un abrazo y a ganar! Vamos?

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viernes, 27 de junio de 2014

Jugar como Campeón y Vencer a los Campeones del Mundo (Mi análisis de Chile-Brasil)

Lo primero, darles las gracias a todos quienes se han incorporado recientemente a la nueva comunidad que aperturado en Linkedin con el nombre de ICE: Ideas, Comunicación y Estrategia), la cual en menos de 24 horas se han incorporado numerosos profesionales tanto chilenos como extranjeros no sólo del mundo de la comunicación, sino también de la educación, la ingeniería, los negocios, la moda, gastronomía y rubros industriales muy, pero muy interesantes.

Gracias, desde el corazón, porque la idea de este espacio forma parte de mi proyecto de emprendimiento como consultor y asesor comunicacional para empresarios y personas. Prometí a través de mi blog que haría una columna sobre las claves del triunfo de Chile sobre Brasil este sábado 28 en Belo Horizonte, por los octavos de final del Mundial 2014.

Y aquí van:

1. Chile gana a Brasil este sábado porque a diferencia de otras selecciones chilenas de mundiales anteriores, en ésta hay una generación de jugadores que han crecido con una mentalidad tremendamente superior a otras. Con el debido respeto que me merecen aquellas que conocí como la Carlos Caszely, Condor Rojas, Aravena y Basay. O la de Zamorano, Salas y compañía.

2. Esta mentalidad, esta convicción, esta manera de ver el fútbol que va más allá del negocio y que viene precedida por un trabajo articulado por tres personajes que son claves: los argentinos Marcelo Bielsa y Jorge Sampaoli, y el chileno Harold Mayne-Nichols. En el caso del chileno, es periodist
a y ex presidente del fútbol chileno que se la jugó por estructurar un staff técnico de calidad, disiciplinado y a su vez arengado por un gran profesor como es Bonni (también argentino) y muy buenos preparadores físicos. Mayne-Nichols hizo de una generación de jovencitos hambrientos de logros, confianza y disciplina, una plataforma futbolística sencillamente maravillosa.

3. Y ojo: para lograr afianzar esta mentalidad, había que globalizarse. Buscar experiencias extranjeras exitosas. Tanto Mayne-Nichols como Bielsa son hombres del mundo deportivo. El ex presidente del fútbol chileno trabajó por muchos años en el extranjero como miembro oficial de la FIFA, recorrió estadios, conoció entrenadores, se codeó con federaciones y supo que Chile necesitaba salir "del metro cuadrado" y abrirse a un juego más ofensivo, en equipo y sin depender de un jugador "estrella" que finalmente terminaban estrellados.

4. Tanto Bielsa, como su staff, fue un lujo y un privilegio ya que inmediatamente se notó el cambio de mentalidad en el equipo. Le dio espacio a todos los jugadores juveniles que participaron en la Copa del Mundo de la categoría en Canadá, y trabajó incansablemente junto a los clubes chilenos serios en proyectarlos internacionalmente. Bielsa y compañía sabían que si no estos chicos no se codeaban internacionalmente, sería un fracaso. Y lo logró

5. Chile clasificó históricamente dentro de los tres primeros en su grupo para el Mundial de Sudáfrica. Se dio el lujo de derrotar a Argentina en Buenos Aires. Fue calificado por todos l
os entrenadores sudamericanos como el equipo sensación, vertiginoso, ordenado y ultraofensivo del año y en sudamérica. Y lo mejor: un equipo que empezó a correr los 90 minutos, como lo vemos hoy en Holanda y Alemania. Al más puro estilo europeo. Correr. Presionar. Tener el balón. Y meter el gol. Diferente al metro cuadrado. Al balonazo. Al especular los partidos. Y hacer pillerías como el Maracanazo de los 80.

6. Luego de una polémica operación política para sacar a Mayne-Nichols de la presidencia, Bielsa optó por renunciar a la banca del equipo chileno y lamentablemente Chile cayó en una espiral de derrotas y volvió a ese ritmo desordenado y los jugadores no pudieron asimilar el estilo de otro argentino, Borghi, cuya política de trabajo estaba basada más en dejar hacer que en mantener el mismo esquema de Bielsa o más bien perfeccionarlo.

7. Lo anterior obligó a la nueva dirigencia aceptar que lo estaba haciendo pésimo y tuvo que llamar a un entrenador cuya trayectoria en la Universidad de Chile lo llevó a la "titularidad" de la opinión pública deportiva y era el que más se acercaba al estilo Bielsa. Jorge Sampaoli. Y bueno, ya sabemos lo que ocurrió. Chile despertó y luego de estar casi fuera de la clasificación, de la mano de Sampaoli y un staff similar al de Bielsa, compró los pasajes a Brasil con un juego maravilloso, volvió la alegría al camerín, la disciplina, el orden, y lo clave: Sampaoli volvió a engranar la línea que comienza con Bravo en portería, Medel en la defensa, Vidal en el mediocampo y Sánchez y Vargas como artilleros.

8. Chile llega al partido de Brasil precidido por excelentes resultados que debemos categorizarlos como breves mini mundiales o finales: en los amistosos jugó como si fuera un campeón ante España y los hispanos empataron al final del partido. Y no por merecimiento de los españoles sino por una desaplicación de la defensa chilena. A Inglaterra, los chilenos le dieron un baile de cueca y una dósis del mejor cabernet chileno, y los vencieron en Londres. Y frente a Alemania, pese a caer derrotada por la cuenta mínima en Alemania, los germanos alabaron el juego de Chile y terminaron aplaudiendo a los aguerridos futbolistas chilenos.

9. Luego vino el partido frente a Australia y España en la primera fase. Dos victorias inapelables. Ante Holanda, Chile se desordenó al final. Cometió un error que no debe suceder frente a Brasil: creyó que había que jugar ajedrez y cayó en la trampa del técnico Van Gaal y luego de casi 70 minutos empatados a cero, Chile se desconcentró, y se derrumbó. Perdió el partido, y la magnifica oportunidad de clasificar primero. Hay que reconocer que Chile tenía equipo para vencer a Holanda, pero jugó el partido al estilo que no es de Chile.

10. Chile gana a Brasil porque tiene una generación dorada de jugadores que hoy brillan en clubes mundialistas: Alexis Sánchez y ahora el portero Claudio Bravo, en Barcelona; Vidal como volante indiscutido en la gloriosa Juventus italiana; Isla como uno de los mejores laterales del calcio italiano también en la Juve; en Brasil, figuran Mena, Valdivia, Aranguiz en equipos con Internacional, Palmeiras; Vargas que despertó en el Valencia español y Napoli lo quiere de regreso; Díaz en el Basilea de suiza; y Gary Medel que pese a jugar en un equipo de segunda división inglés, el Cardiff, es hoy el futbolista con más pases efectivos concretados en el Mundial de 2014. Estimados amigos, Chile tiene equipo. Sí. Equipo. A diferencia de Argentina, Brasil, Inglaterra o Portugal que dependen de jugadores desequilibrantes y quienes tienen el gol como Messi, Neymar, Rooney o Cristiano Ronaldo.

11. Chile gana a Brasil este sábado porque no tiene nada que perder. Brasil sí. Es el anfitrión. Jugará con la totalidad del estadio a su favor. Una FIFA también haciendo lo suyo y a veces no tan limpia. Chile gana a Brasil, porque esta selección brasileña ya no juega como en sus mejores momentos: con estrellas y en equipo. Tiene una defensa lenta, errática. Se desajusta si te mueves por los laterales. Y si le haces un gol antes de los 15 minutos, se desajusta aún más.

12. Chile tiene replicar también los buenos oficios que hizo México en la primera fase frente a los cariocas. Tomó el balón. Quitó el balón. Y jugó como si fuera el partido de su vida. Como si fuera la final del campeonato mundial. Con una defensa que fue una pirámide azteca y un portero que fue el Dios del Sol y no dejaba entrar nada a su reino que era sagrado.

13. Repito, si Chile juega este sábado en equipo, ordenado, toma la iniciativa, juega por los lados, no al pelotazo, si quita el balón desde la salida y mete una marca asfixiante a Neymar, Chile se repite el plato con un campeón mundial, al igual que lo hizo con España, y de paso avanza a los cuartos de final, y seguramente aparece un nuevo campeón que es Alemania.

Y si quiere saber más, en semifinales, de avanzar, tocaría con Argentina.

Definitivamente, se hace realidad mi frase que he publicado durante el Mundial: para ser campeón mundial tienes que jugar como campeón y vencer a los campeones mundiales. Qué mejor trabajo, que mayor orgullo poder vencer a los campeones mundiales y que por primera vez en la historia del fútbol global, un equipo resultó campeón del mundo venciendo a los campeones del mundo.

Al escuchar las declaraciones de casi todos los jugadores, previo al match de este sábado, puedo deducir que existe un ánimo tremendo. Al escuchar las declaraciones de Alexis Sánchez, quedo con esa sensación que estos chicos dejaron de ser chilenos y pasaron a ser jugadores del mundo. Porque en Chile, lamentablemente, aún existe esa mentalidad derrotista, pesimista y bipolar. El mismo Sánchez lo dijo en conferencia: “En Chile, país, no hay mentalidad ganadora, como sí en Argentina. Y eso, tiene que cambiar”. Estoy 100% de acuerdo con Alexis.

Con el debido respeto. Este sábado, no jugará Chile. Saldrá a la cancha un equipo se hizo desde la pobreza, desde la tragedia, y que ha crecido desde el amor, la pasión, y ha sido iluminado por brillantes estrategas que los han sabido orientar y formar. Extranjeros por cierto. Equipo que jugará como equipo. Equipo que saldrá a la cancha a jugar como si fuera la final del campeonato mundial. Cualquiera sea el resultado, no será Chile el que juegue. Será el Campeón del Mundo.

Vamos Campeones! Y sigan dando el ejemplo!

lunes, 23 de junio de 2014

¡30 MIL GRACIAS! ( y mi análisis Chile-Holanda)

Primero es lo primero: GRACIAS! 30 mil gracias porque hoy, lunes 23 de junio de 2014, este blog de Comunicación y Perspectivas ha traspasado las 30 mil visitas desde Chile y todo el mundo. Un espacio que he dedicado no sólo para tratar de temas de comunicación en torno a nuestra sociedad, sino también invitarlos a reflexionar sobre quiénes somos, lo que hacemos y aportar desde mi corazón y el pensamiento un poco de optimismo y luz para tu día y semana.

Y me quiero dar un gusto. 

Celebrar estas 30 mil visitas con un artículo sobre el deporte que desde pequeño me hizo vivir y soñar con triunfos de vida, con esa sensación maravillosa que se siente al estar jugando junto a otros amigos, y tener una meta: traspasar el umbral de ese deseo profundo, de esa meta que todos tenemos en la vida. El gol en cada meta cumplida. El gol, en cada paso dado en firme y en optimismo. Me refiero al fútbol, un deporte local, regional y mundial. Un deporte que mueve miles de millones de dólares en publicidad, competencias y jugadores. Un deporte que mueve ilusiones y esperanzas a través de quienes lo practican y ofician como profesión.

En mi artículo de la semana pasada, les comentaba sobre la emergencia que han tenido estos equipos denominados "chicos" que han sorprendido a los grandes. Me refiero a Chile, Costa Rica, México, USA, Colombia, Ghana, entre otros. Y que a mi juicio de sorpresa no tiene nada, porque son equipos que han madurado tanto en lo deportivo como en lo disciplinario. Y viceversa, los "grandes" como Brasil, Argentina, Inglaterra, Italia, España y compañía, han exhibido un fútbol irregular y ajustado a resultados opacos e incoherentes a lo que son como naciones desarrolladas en cuanto fútbol y empresa, deporte e hinchada.

Escribo este artículo, tras la amarga derrota sufrida por Chile frente a Holanda, que desde el pasado mundial de Sudáfrica en 2010, viene con hambre de revancha tras perder la final frente a España. Una Holanda que juega inteligente, rápida, en equipo, sin estrellas ni estrellados, que tiene un entrenador que sabe leer los partidos antes, durante y después de disputado el encuentro. Me refiero al holandés Van Gaal. Una Holanda que dejó de ser la otrora conocida "Naranja Mecánica" y deberían bautilizarla como el nuevo Muro Europeo, por lo indestructibles que son cuando quieres traspasar desde su mediacampo y defensa.

Chile pese a tener mayor posesión del balón (sobre el 50%) y jugar durante casi 70 minutos volcado sobre Holanda, no le hizo ni cosquilla a la portería holandesa. Holanda sabía que tenía que jugar fuerte. Pegar desde el primer minuto. Bajar a Alexis Sánchez cada vez que tenía la pelota. Cortar cada avance desde el mediocampo. Y esperar a mitad de cancha. Y nuevamente, pegar duro. Fue un partido donde Holanda se ha hecho especialista: dejar jugar, y esperar el contra golpe y ahí matar. 

Y fue lo que sucedió. Bastó que llegaran los últimos minutos de partido para que en dos jugadas, Holanda le diera jaque mate a los chilenos. Y lo hizo magistralmente. Con dos jugadores frescos que venían como reemplazo en el segundo tiempo. No lo hicieron las estrellas Robben, ni Snejider. Sino que dos jugadores que venían con la vista clara del partido y las órdenes de su técnico desde la banca. Eso es EQUIPO.

La oncena chilena cayó en la trampa de su par holandés. Soltó las marcas que durante casi 80 minutos tuvo contenida a Holanda, y dale! Dos goles. Y a celebrar los naranjas.

Nada qué decir. Holanda es a mi modo de ver el candidato más firme a ser el finalista de este Mundial junto a Alemania. Ni Italia, ni Brasil ni Argentina.  Habrá que ver qué sucede frente a México este fin de semana en 8vos de final. 

Podrán decir que estoy loco, pero prefiero a Brasil que a México en octavos de final. Sí. Al equipo anfitrión. Al ganador de 5 mundiales. Al ganador de torneos continentales, olímpicos y regionales. Al que erigió como O Rey, a Pelé. Al país donde se juega el juego bonito, alegre, y donde se respira fútbol desde la playa hasta la selva, además de la caipirinha y las hermosas garotas y el bossa nova.

Mis razones:

Este Brasil definitivamente no es el Brasil que conocíamos de Mundiales anteriores. Su juego se torna lento, sus marcas se quedan cuando lo desequilibras por los laterales.  Su defensa es lenta. Se desconcentran. Y lo peor que lo podría suceder a un equipo: se ha hecho dependiente de Neymar y sus goles. No juega en equipo. Juegan para Neymar. Al igual que Argentina para Messi. 

Revisé las estadísticas y en su partido con México, Brasil pese a tener más posesión del balón (54%), no pudo encajar un solo gol frente a la portería de un inspirado Memo Ochoa, el mexicano más querido hoy en su país, además del Chavo del Ocho y Cantinflas. Y por una sencilla razón: México se creció, se inspiró y supo contener las líneas brasileñas con eficiencia. Fue letal. Y lea bien ésto: los aztecas completaron 352 pasos completos, cerca de un 74%, frente a un 30% de los brasileños. No lo podían creer.

Cada jugador mexicano fue una marca dura e infranqueable frente a los cariocas, que no creían lo que sucedía. Fue un verdadero tequilazo! Y si con tequilazo los mexicanos pudieron contener a Brasil, creo que Chile jugando como el mejor vino tino de su producción nacional, puede lograr lo mismo.

México fue letal con Camerún (1-0) y este lunes frente a Croacia (3-1). Era el peor rival para Chile. Y viene inspirado. Agarren a los mexicanos, porque nadie los detiene. Y si Holanda no inventa algo contra la resaca de su juego (casi) perfecto, no se sorprendan de que en cuartos estemos viendo al Dios Azteca bailando samba en el Maracaná.

¿Cómo vencer a Brasil el sábado? 

Se los cuento en mi próximo artículo este miércoles. Un adelanto: No es cuestión de Alexis ni Vidal. O de un Bravo portero en el arco. Es algo mucho más simple pero a la vez muy difícil para un equipo chileno que por años ha tenido que lidiar: su actitud, su personalidad. Habrá que ver si es capaz de reponerse a la derrota de este lunes frente  Holanda y revisar con lupa los partidos de Brasil frente México y Croacia. Porque el que hizo hoy ante Camerún, sencillamente fue un chiste. Los africanos no merecían estar en este Mundial. Vinieron a pasear. Habrá que ver si Chile se saca de la mente las dos derrotas en octavos de final frente Brasil en los dos últimos mundiales. 

Con el debido respeto de los equipos chilenos, la buena noticia es que estos jugadores chilenos dejaron de jugar hace mucho tiempo con mentalidad chilena: ahora lo hacen con mentalidad de la Juventus de Italia, del Barcelona y Valencia español, del Santos e Inter de Brasil, de equipos internacionales que juegan con mentalidad ganadora, con disciplina, en alto rendimiento y lejos de la burda farándula chilensis.

Este equipo chileno me gusta. Lo respeto. Es un claro ejemplo de esfuerzo y trabajo técnico que viene desde la semilla dejada por Marcelo Bielsa y compañía desde antes del Mundial de Sudáfrica. Tiene mentalidad ganadora y (creo) que no son bipolares. Por ahí va la cosa.

Pero más detalle de éste análisis, lo dejo para el miércoles. 

Un abrazo, y nuevamente, gracias! Gracias por las 30 mil visitas.






sábado, 21 de junio de 2014

El Mundial de los que no eran "Grandes"

"La fuerza de vivir, el secreto de un pensamiento basado en esperanzas, el deseo de alcanzar esa cima difícil pero a la vez maravillosa, inmensa, y justa. La energía de tus manos, de tus pies, de tu alma, más allá de lo que observas y comprendes en cada día o de tu vida. Este planeta (universal) que nos colma de momentos y nuevas historias, de un día a día pleno y a veces no tan pleno. Y más allá de todo o más allá de nada, seguimos siendo lo que me encanta escribir a través de esta columnas: Personas de Pura Vida en vida".

Hola. He querido comenzar el artículo de este fin de semana con esta reflexión que se me vino a la mente, luego de un mes en que he podido disfrutar de un descanso reparador junto a mis hijos, familia y amigos. Y viviendo muy de cerca el Mundial de Brasil, en el cual millones de corazones ponen sus fichas ya sea como jugadores, fanáticos, no tan fanáticos, empresas y sus ganancias, gobiernos,  clubes y sus proyectos, pero más allá de eso: el mundo observa más o menos de cerca lo que allí ocurre. Y sucede. Con TV, Radio, Internet, diarios. Y mucha samba!

Un Mundial con sabor, con alegría, con magia. Propia del pueblo brasileño. Personalmente tuve el privilegio hace unos años de pisar tierra carioca, Sao Paulo, y debo reconocer que el brasileño transmite ese sentimiento y pasión por la vida de manera muy cercana y palpable. Un Mundial, que a diferencia de los últimos realizados en Estados Unidos, Japón-Corea, Sudáfrica, ha dejado en evidencia que ya no hay equipos pequeños y mucho menos, equipos grandes. La eliminación del campeón, España (frente a un equipo chileno motivado y ordenado), Inglaterra (por una inspirada Costa Rica), y la irregularidad de Italia, Alemania o Argentina, la verdad es que demuestra que más allá de los millones y millones de dólares invertidos en jugadores, publicidad y preparación, lo que al final (siempre) determina en éxito o fracaso es cuánto corazón y fe ponemos a la hora de estar frente a un desafío...mundial.

Me ha llamado profundamente la atención la fuerza, la entereza, el respeto y el sentido de disciplina con que jugadores de equipos a quienes se les daba por eliminados o serían apabullados por los "grandes", finalmente fueron los que realmente demostraron que sí eran capaces de estar a un nivel Mundial y jugar el mejor partido de sus vidas. 

Lo que hizo México frente a Brasil, o Costa Rica ante una Italia desdibujada. Es para analizarlo no sólo como un caso notable de ejemplo deportivo. Sino también como un caso donde se trabajó mente, espíritu, estrategia, amor y respeto por el rival. Lo que hizo Chile con España, en este Mundial, y anteriormente en partidos amistosos con Alemania y la propia España, fue notable, inspirador y mágico.

Y si en América Latina, tenemos jugadores o deportistas inspirados, que han respetado las instrucciones de sus sabios entrenadores, para qué decir lo que han hecho los futbolistas africanos de Ghana o europeos de Croacia. Los de Ghana, a fuerza y temple, disciplina táctica y una preparación técnica y conocimiento en detalle del equipo rival, hizo del favorito Alemania, un equipo desdibujado y casi al borde de la derrota.

En definitiva, el Mundial que será recordado porque el fútbol dejó de ser de los que hasta ahora conocíamos como los "grandes". Este Mundial será recordado porque hubo una vez futbolistas que con un pasado marcado por la pobreza, violencia interracial, guerras, o complejidades familiares, supieron seguir el camino de sus certezas, de su motivación, de creerse el cuento, de proponerse ser los campeones del mundo. 

En mundo globalizado y cada día más disperso, equipos que no eran los "grandes" demostraron que tenían la certeza, las ganas, la fuerza mental y física, la concentración y todo el alma para vencer a equipos campeones mundiales, de torneos continentales y cuyos jugadores están tasados en millones y millones de dólares y euros, y numerosas portadas y spot publicitarios. 

Esta semana, estando en un terminal de buses escuchaba por el televisor una entrevista al férreo y excelente defensor chileno, Gary Medel, quien contaba que su motivación para llegar a un Mundial y ser considerado uno de los mejores futbolistas de Chile, estaba basada en la idea de devolverle a su papá la tranquilidad económica luego de haber trabajado tantos años como barrendero y haberle regalado a su hijo Gary Medel, la oportunidad de ser alguien en la vida. Y vaya que lo logró. Gary contaba que todo su esfuerzo en la cancha era también para tener el dinero suficiente y sacar a su padre de un oficio tan digno pero también tan duro como es ser barrendero. Notable.

Escribo este artículo aún sin saber el resultado de Chile frente a Holanda este lunes. Partido muy entretenido porque juegan dos equipos que han sabido sortear dificultades y se han parado frente a la adversidad. Con entrenadores de lujo, aplicados, y conocedores del buen fútbol. Chile juega frente al actual subcampeón del mundo. Y porqué no, también Holanda podría ser parte de la nómina de equipos "grandes" que Chile derrotó a punta de esfuerzo, corazón, disciplina táctica y respeto por el rival.

Pase lo que pase este lunes, Chile y el resto de los equipos que eran considerados como pequeños, nos han regalado un claro ejemplo que la vida más allá de la adversidad, de los problemas, del estrés, de las deudas, de un quiebre personal o familiar, de una meta no cumplida. Estos equipos, y estos jugadores latinos, africanos, europeos nos han enseñado que si vivimos como campeones, responsables, motivados, inspirados por un sueño que es alcanzable, si ponemos lo mejor de nuestros pensamientos, lo mejor de nuestras ideas, y nos unimos en equipo con otras personas y comunidades, el resultado será disfrutar de un triunfo basado en esa satisfacción de sentirnos ganadores, ganadores de vida, de sueños, de momentos, de amor, de paz, de una sonrisa regalada a nuestros hijos, amigos. Del triunfo de un amor que siempre quisimos vivir y alcanzar.

El triunfo de la vida, de tu vida. De tu historia. 

Antes de despedirme, quiero darte las gracias por darte el tiempo en leer esta columna. Al momento de redactarla, estaba a punto de alcanzar las 30,000 primeras visitas desde todo el mundo. Es por eso, que con todo el corazón quiero invitarte a que sigas formando parte de esta ventana que he levantado desde el sur del mundo, Concepción. Y a que sigas creyendo en ti, en tus pensamientos, en el amor, en la fuerza de vida. Y en esa idea que siempre has querido darle luz y forma.

Un abrazo, fuerza y Pura Vida! 

Viva Chile, Viva mi querida Venezuela, Arriba América Latina, y un abrazo grande a todo el planeta que me lee y me acompaña semanalmente.-










 

martes, 3 de junio de 2014

Viajer@s (siempre en tí)


Hola viajer@

! Cómo estás amig@ querid@....hace mucho tiempo que he querido escribirte esta carta porque sé que la necesitas y porque yo también lo necesitaba...porque eres esa persona que llevo en mi corazón y en mis pensamientos...


Y es precisamente ahora, a mitad de año 2014, y ad portas de llegar a mis 30,000 primeras visitas en este blog (tuy@) en que me animé a escribirte para expresar mi admiración, mi deseo de que esta Vida la vivas en pleno, sin miedos, sin ataduras, y sintiendo el destino como esa suave brisa que refresca tus pensamientos y deseos como persona y alma única del mundo.

¿Cómo va tu expedición de vida? He sabido -a través de mi corazón- que has tenido momentos difíciles y a veces ingratos y tristes. He sabido por el Águila mensajera, que has tenido que lidiar con seres extraordinarios, duros, salvajes e impensados. Que ha sido un viaje largo, a veces eterno, y con momentos en que no quieres seguir adelante y prefieres dar paso a la renuncia. 

Pero también he sabido por mi Águila mensajera, que dentro de tus pensamientos hay certezas, hay amor, hay deseo intacto de ser y seguir siendo un alma maravillosa, que quiere seguir en un camino de mucho esfuerzo, y acciones concretas hacia el logro tus objetivos. 

Recuerdo tus logros, nuestras conversaciones, esa complicidad al emprender juntos ideas y sueños. Siendo niños y adultos. Siendo amig@s, y a veces no tan amig@s. Siendo coleg@s, compañer@s, y lo mejor: personas.

¡No claudiques! Respira profundo. Visualiza el destino hacia donde quieres llegar junto a tus deseos y sueños. No pienses que te hemos olvidado. No des espacio a la tristeza, a la añoranza ni a la pena, porque no has perdido nada. Se pierde sólo cuando dejamos de sentir, de vivir. Y estoy seguro que tú no has perdido la fe, la templanza, y el espíritu de lucha por seguir adelante en esta camino, en esta (nueva) ruta de vida.

Te escribo como me gusta hacerlo: desde el corazón, desde mis pensamientos en positivo, creativos y ajenos de dolor, orgullo o alguna deuda pendiente. Te escribo desde la primera y la última página de un libro llamado Vida, Pura Vida, de mi deseo de estar pronto contigo, de verte, abrazarte, conversar y tendernos sobre la arena o la tierra, y sentir que somos de la misma energía del Universo, que somos magia, amor, fuerza y destino.

En este mes de junio, desde mi maravilloso otoño sudamericano, te seguiré escribiendo, pero también enviando mis mejores deseos para tu expedición hacia lo extraordinario. Seguiré pensando que piensas en mí también, que recuerdas los mejores momentos, que nunca olvidas mi sonrisa, mi mirada y mi fe. Que unidos, somos más fuertes. Y que la Vida, Dios, la Vida, está hecha para vivirla como si fuera la primera y última. Como si fuera sólo un flash al momento de fotografiar una mirada, un sentimiento, un movimiento, un espacio dentro muchos espacios maravillosos.

Seguiré -como tú- caminando, escalando o navegando. A veces me sentiré en el cielo, y desde ahí, junto a mi Águila mensajera, te enviaré miles de notas musicales, poéticas, como en recital del Universo, lleno de flores y aguas cristalinas, mágicas y universales. Lleno de sonrisas y alegrías regaladas y benditas por mis dos pequeños príncipes que nacieron para ser Reyes.

Te escribiré desde la Universidad de los libros y las estrellas de una novela eterna, enamorada. Te escribiré siempre, con la esperanza (!)

Seguiré aquí, como tú, ahí. Y estaremos juntos, siempre. 

¡Nos vemos pronto! 

(A) Pura Vida!

Cristián