El silencio (so) de Benjamín… ¿la otra cara de Chile? (!)

Siento una rabia muy grande. Y una pena enorme.  Y la pregunta: ¡Por qué! Qué diablos está sucediendo en Chile hoy.  Porqué nuestros políticos excluyen de sus agendas y ofertones electores,  establecer programas o acciones centradas en trabajar en la recuperación de nuestros VALORES HUMANOS. Cuáles es el temor de hablar de respeto y amor como eje transversal de cualquier programa de gobierno, y en desmedro de eso se disparan de izquierda a derecha debatiendo si el modelo económico y social actual y/o de ayer,  es el mejor.

Estoy seguro que la historia de Benjamín y su penoso silencio tampoco es tema para ustedes, señores “lideres” políticos, económicos y sociales. Quienes seguro estarán hablando en televisión para la cuña electoral sobre este caso pero pasado mañana será (nuevamente) caso olvidado…porque la memoria en Chile…es frágil.

Tranquilo Benjamín, que tu silencio no pasará en vano. Por lo menos desde esta columna que desde 2007 he levantado no sólo para escribir de actualidad sino para contarle al mundo, lo que sucede con nuestra sociedad, con nuestra gente. Y tu caso, mi querido Benjamín, no pasará a la “base datos” de noticias que ya ocurrieron.

Y comprendo a tu papá. El dolor que siente por tu pérdida. Soy papá también. Y la rabia hacia el sistema. Cuánto tiempo fuiste acosado por tus propios compañeros.  Tus miedos. Tu temor. Todo en silencio. Y con tus nueve añitos, te convertiste ya en mi héroe. Cuántas humillaciones debiste vivir de parte de tus propios compañeritos en clase, sin saber ellos que en el fondo estaban preparando tu viaje de retorno a donde seguramente nos miras de reojo pensando que allí tu silencio se convierte en gritos de alegría, sonrisas, y paz…junto a Dios.

La noticia me ha calado hondo.  El que hayas defendido tu maqueta elaborada con tu papito, como parte de tu responsabilidad para cumplir con las tareas del colegio Rafael Valdivieso, en Santiago de Chile.  El que ese compañero tuyo te haya empujado y la punta de un lápiz se haya encrustado en tu ojito, me duele hasta el alma.  Tu muerte cerebral y posteriormente tu muerte definitiva, hoy sábado 15 de junio, me motiva a decirle al mundo que ESTO NO PUEDE VOLVER A OCURRIR EN NINGUNA ESCUELA DE CHILE Y EL MUNDO.

Acá en Chile le han denominado a la violencia escolar “Bullyng”. Y según el “parte” periodístico eso fue. Yo sostengo, tal como lo señalo en mi primer libro publicado este año, que lo que sucedió es el RESULTADO DE TENDENCIA DE NUESTRA SOCIEDAD QUE CADA DÍA SE OLVIDA MÁS DE LOS NIÑOS Y LOS JÓVENES, NOS OLVIDAMOS DE SER FAMILIA DE VERDAD, DE PENSAR LAS CIUDADES COMO CIUDADANOS Y NO COMO COMPETIDORES Y PROVEEDORES DE CONSUMO Y GASTO DE MALL DE FIN DE SEMANA.

Tu viaje al cielo, Benjita, no pasará en vano en este blog. La recordaré cada vez que pueda. Para tu tranquilidad, mi querido niño, hace mucho tiempo he venido levantando estos temas de la violencia de la ciudad y sus “ciudadanos” en mi blog con el objetivo de levantar una opinión pública más presente y generar un cambio social YA.

Benjamin Apablaza, tu papito Pedro, le dijo a mis colegas que tú no sabías pelear.  Sabes, en el dolor que debe sentir tu papá, debe estar orgulloso de lo que hizo.  Fuiste un valiente. No caíste en la violencia como respuesta a la violencia.  Ojalá que muchos adultos vean tu caso y te sigan como ejemplo. Como diputados, senadores, alcaldes, incluso candidatos a presidente de este país que todos los días se incrustan “puntas de lápices en sus ojos”, a través de la violencia verbal, y mensajes cargados de denostar al otro/a.

Si fuimos capaces de escupirle en la cara a una ex presidenta; si fuimos capaces de no pedir perdón  por no haber hecho bien las cosas durante un cataclismo de la naturaleza  con las consecuentes pérdidas humanas; si somos capaces de hundir y humillar al otro/a en pos de alcanzar una posición o ventaja social, política o económica; si somos capaces de ser desleales….

Cómo no iba a ocurrir tu silencio…Benjamín! Cómo!

Benjamín, este artículo es para contarle desde este sábado a mis lectores de Chile, América Latina, Europa, Asia y el mundo en general, que tu silencio dejó de serlo. Y es mío también. Pero lo convertiré en amor, en pasión de escribir, en expresar mi molestia y al mismo tiempo invitar a que cambiemos esto. De una vez por todas. La familia. Los hijos. Los jóvenes. Merecen respeto, amor, cuidado, lecturas, alegrías, preocupación. Apoyo. Dedicación. Estar con ustedes, más tiempo. Y menos tiempo en la oficina o en after office.

Que Dios te bendiga Benjamín. Que Dios le de paz, sabiduría y fuerza a tus padres. Tu familia.

Tu silencio, dejó de serlo.

PD: para quienes crean que estoy exagerando…les dejo unas cifras oficiales:

El 62% de los escolares de cuarto básico reconoció ser víctima de bullying. El 31% lo sufre casi todas las semanas, lo que ubica a Chile quinto entre los países con peores índices de violencia escolar, detrás de Tailandia, Qatar, Bahrein y Marruecos. Nueva Zelandia, Omán y Emiratos Arabes tienen las mismas tasas que Chile. Otro 31% de los alumnos  chilenos reconoció sufrir violencia casi todos los meses. El índice de violencia en Chile es 10 puntos más que el promedio internacional (Fuente Estudio Internacional de Tendencias en Matemática y Ciencias (Timss) )